Sunday, August 26, 2007

Sísifo

Los dioses habían condenado a Sísifo a empujar sin cesar una roca hasta la cima de una montaña, desde donde la piedra volvería a caer por su propio peso. Habían pensado con algún fundamento que no hay castigo más terrible que el trabajo inútil y sin esperanza.
Albert Camus

Una de las actividades que tienen que hacer los mecánicos de mi trabajo es poner pesas a una estructura metálica (el telescopio) para equilibrarla. Esta operación se llama balanceo. El número de contrapesos y dónde colocarlos depende del instrumento que se haya montado pero, como hay sólo tres o cuatro configuraciones distintas, es muy fácil repetir siempre los mismos pasos una vez que ya se conocen. Pues bien, sólo unos de los mecánicos tiene un cuaderno con notas sobre cómo balancear en cada caso. El resto repite el proceso desde el principio una y otra vez. Huelga decir que el que tiene la libreta termina el trabajo en cinco minutos mientras que los otros dedican más de media hora a la operación.

Me pregunto si lo que lleva a los mecánicos a trabajar en vano no será que son conscientes de la completa inutilidad de la vida. Quizás, no guarden memoria de la colocación de las pesas para así tener que comenzar el trabajo de nuevo, eternamente, porque conocen la estrechez de la vida humana y lo inútil que resulta tener objetivos trascendentales. Es posible que se nieguen a hacer nada por lo eterno porque para ellos la eternidad es algo que carece de significado. Son conscientes de que somos libres sólo por un tiempo determinado: mientras vivimos. ¿No será acaso que el esfuerzo en sí mismo basta para llenar el corazón de un hombre? Al fin y al cabo Homero decía que Sísifo era el más sabio y prudente de los mortales.

5 comments:

Anonymous said...

o no será que verdaderamente empezamos a ser libres cuando dejamos de estar vivos?

Anonymous said...

joer karra...

Pero si, yo también tengo la impresión de que la existencia, en si misma, es una trava a la libertad, un conflicto constante. Maquiavelica es la existencia.

Solo disimulable subiendo y bajando rocas de una montaña o juntandose con los amigos en una terracita a tomar cerbezas o fantas y charlar de cosas banales (para un servidor opción, esta última, mejor que la primera -dentro del reducido margen de libertad de elección que permite la existencia-).

Anonymous said...

Lo chungo es la consciencia, pero afortunadamente no siempre se tiene presente.

Por otro lado, Sísifo era un vividor, no nos olvidemos cuando se escapó del infierno y venga rascarse la barriga en la playa.

Anonymous said...

Creo que a eso se le llama ser práctico y ocurrente.

Anonymous said...

Son sabios, Macorina.Aunque no lo entendamos.